En sus textos se pueden hallar joyas del hablar por hablar, de la nada más absoluta como este, que recoge el informe de balance 2019 de Cubavisión y que es bla bla bla en estado puro: “En la realización de los procesos que tributan al logro de una programación como la pensada desde el canal Cubavisión… En el contexto actual el consumo audiovisual se diversifica imponiendo nuevos retos a los medios de comunicación, por lo cual el accionar de nuestra televisión requiere ideas renovadoras que aseguren los resultados a la altura del momento actual… Le proponemos esta mirada y la proyección 2020 de cada grupo creativo que contribuye a la conceptualización del diseño de programación del canal Cubavisión, siendo este el mejor regalo que se le puede entregar a la Televisión en estos 70 años, que de ellos 60 son de televisión revolucionaria y por lo tanto auténtica.”
Este último concepto, el de que la TV de antes era un desastre, está presente continuamente. Así dejan caer, como el que no quiere la cosa, que la buena, la bárbara, la “auténtica”, es la tele que se hizo bajo el paraguas castrista.
Como si se pudiese tapar el sol con un dedo, como si los televidentes cubanos, que vieron los programas de una y otra época, fueran imbéciles incapaces de juzgar por sí mismos.
Hay mucha tela por donde cortar en dicha web, vivo ejemplo de manipulación al estilo de la propaganda más burda. Dense una vuelta por ella para que disfruten. Un ejemplo: el 1 de marzo de 2020 se recomendaba una película proyectada en el espacio “La séptima puerta" aplicándole una visión crítica que no puede ser más simplona y estúpida, un parámetro estético que le ronca el mango: “Parásitos” es buena porque no le gusta a Donald Trump.
Este es el enlace:
http://www.tvcubana.icrt.cu/…/4720-en-la-septima-puerta-un-…
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