Me
dicen que ha fallecido Eva. Pero no me lo creo. Entro en Internet y encuentro
la noticia que lo confirma. Pero ya saben como es Internet de mentirosa.
No es
cierto, no puede ser verdad. No es posible que se haya ido, que el mundo se
haya quedado sin la generosidad, el entusiasmo, la sonrisa, el buen rollo, el
amor por la profesión, el compañerismo bien entendido de esa mujer excepcional
que pasó por los charcos del ICRT sin mancharse con la traición o la
maledicencia, que no escatimó apoyo y ayuda para todos los que empezábamos, que
repartió lealtad y amistad a sus compañeros y entusiasmo y buen ánimo a
millones de cubanos.
Dice
Internet que ha muerto por problemas cardíacos. Mira que hay que soportar
mentiras. Es falso que le haya fallado el corazón porque el de ella es de los
buenos, de los que no fallan nunca. Y si no, que se lo pregunten a los que la
conocemos, a los que la hemos visto echar palante a pesar de las ingratitudes y
las dificultades, a los que creemos que su sonrisa, eterna, maravillosa y sobre
todo sincera, no se puede apagar nunca.
Sigan
mi ejemplo. No le hagan caso a quienes afirman que se fue. Porque lo que no es
posible, simplemente no puede ser. Y Eva Rodríguez no se ha ido, está hoy, como
ayer, en el recuerdo. Y de ahí, nadie se va.
Saludos cordiales. Tu blog y los escritos sobre los festivales de Varadero son una puerta al paraiso del recuerdo. Hace varios años estoy tratando de encontrar:
ResponderEliminar1- Los hit parades (selección de selcciones) del programa Nocturno de Radio Progreso, Cuba desde 1968.
2- ¿Cómo se llama la canción que cantó Omara Portuondo con el grupo Los Barba?
Si tienes respuesta, escríbeme a: sgortg@uij.edu.cu
Sergio Gort, profesor
Señor Pedraza Ginori, leo su blog bastante a menudo y he comprado sus libros. Mi nombre es Ernesto Ramón Domenech Espinosa, nací en el 1968 y pude ver, escuchar y disfrutar muchos de los proyectos que Usted y su esposa dirigieron a lo largo de casi dos décadas. Quiero felicitarlo por toda esa labor, por su ingenio, gracia y creatividad que hicieron del cubano una mejor persona y muchos sobreviviéramos entre tanta mediocridad y vileza desatada en nuestro país desde 1959. Quiero además reconocerle sus excelentes escritos, su verdadera cubanía, su fino sentido del humor, respeto a la verdad, su elevado concepto de la Amistad y la Familia y por habernos ilustrado en las interioridades y bajezas que se vivieron y seguro todavía se sufren en el mundo del ICRT y que son ajenas a millones de nosotros. Gracias Amigo por todo eso. Y aquí en Toronto, Canadá tiene Usted un cubano y su familia que le ofrecensu casa y un lugar en la mesa cuando visite mi país de adopción. Siga escribiendo, suerte en sus nuevas ideas y salud para llevarlas a cabo. ernesto
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