Ésta es la primera de las dos piezas que dedicaré a Consuelito Vidal.
La segunda la publicaré en el blog poco después que la presente
La segunda la publicaré en el blog poco después que la presente
y en ella incluiré mis recuerdos e impresiones de esa excepcional artista,
quien con su talento contribuyó sustancialmente
a que yo lograra algunos de los mejores trabajos de mi carrera.
Cuando en 1971 escribí el reportaje que van a leer ahora, Consuelo y yo habíamos hecho juntos algunos programas de “En vivo” y apenas comenzábamos una amistad que duró más de treinta años.
A la dirección de la revista Cuba Internacional, le propuse este trabajo y enseguida aceptó.
Para que los testimonios fueran representativos de varias provincias, me fui a la Terminal de Omnibus de La Habana y les pedí a quienes esperaban la salida de sus guaguas que me dieran su opinión sobre Consuelito.
La entrevista la hicimos en el apartamento del Vedado donde ella vivía, en 25 y B. Antes de tocar a su puerta aquella tarde, me detuve en Buona Sera, -23 e I- para comerme una pizza que me cayó mal por el nerviosismo de enfrentarme en plan periodista a alguien de la categoría artística y personal de Consuelo. Pero ella creó un buen clima desde el primer minuto, lo hizo todo fácil para mí y enseguida se me pasó la desazón.
He aquí el resultado:
He aquí el resultado:
Encienda el televisor. Venga con nosotros a conocer de cerca a esta mujer viva, dicharachera, desenfadada. Tía Tata y Yerma. Lagartija y Catalina de Aragón. Consuelo Vidal: actriz y, con mucho, la mejor animadora de nuestro país. Silencio. Ya tenemos imagen y sonido. Vamos a ver como es
CONSUELITO DETRÁS DE LA FACHADA
por PEDRAZA GINORI
Fotos: IVÁN CAÑAS
por PEDRAZA GINORI
Fotos: IVÁN CAÑAS
ESCENA: CAMPAMENTO DE MUJERES EN LA AGRICULTURA. DE NOCHE.
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MIRIAM (Actriz Miriam del Valle) TERMINA DE MAQUILLARSE
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MIRIAM (Actriz Miriam del Valle) TERMINA DE MAQUILLARSE
FRENTE A UNA RÚSTICA COQUETA IMPROVISADA EN EL ALBERGUE.
DETRÁS, UNA LARGA COLA DE MUCHACHAS QUE ESPERAN IMPACIENTES.
MIRIAM SE DA UN ÚLTIMO “PEINAZO”, REVISA SUS CEJAS Y SE PONE DE PIE.
AUDIO
MIRIAM: Ya terminé. Ahora… a dormir. Tengo un sueño (BOSTEZA). Hasta mañana.
MIRIAM: Ya terminé. Ahora… a dormir. Tengo un sueño (BOSTEZA). Hasta mañana.
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MIRIAM SE ACUESTA EN SU LITERA.
OTRA MUCHACHA OCUPA EL BANQUITO FRENTE AL ESPEJO.
AUDIO
SUENA TEMA MUSICAL DEL PROGRAMA.
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, CORTE A LA CÁMARA TRÍPODE CON MEDIUM SHOT
DE CEPERO BRITO QUE SONRÍE Y PRESENTA.
AUDIO
CEPERO: Muy buenas noches. Aquí estamos una vez más
dispuestos a emprender una agradable excursión detrás de la fachada
en compañía de nuestra simpática Consuelito Vidal.
APLAUSOS FUERTES.
Miércoles, 8:35 de la noche, Canal 6. Consuelo es ese fantasmita que, sin ser visto, se cuela donde quiere para comentar situaciones de nuestra vida cotidiana. Frente a los prejuicios salta la sátira. Lo ridículo puesto en evidencia por la risa. “Detrás de la fachada” –costumbrismo bien hecho- es el programa cómico Nº 1 de la TV cubana.
-- Está en el aire desde hace 14 años.Yo lo hago desde 1960. Me he aprendido más de 500 libretos de ésos. Aunque siempre después, al calor de las situaciones, una va creando algo más.
Dinorah Torres, empleada del Centro Turístico Pasacaballos, Cienfuegos:
-- Está en el aire desde hace 14 años.Yo lo hago desde 1960. Me he aprendido más de 500 libretos de ésos. Aunque siempre después, al calor de las situaciones, una va creando algo más.
Dinorah Torres, empleada del Centro Turístico Pasacaballos, Cienfuegos:
-- Nosotras tratamos de terminar el trabajo temprano los miércoles para ver el episodio de Consuelito.
Yolanda Martínez, Ministerio de Comunicaciones, Habana:
-- Me gusta la forma en que anima Consuelito. Ese diálogo que crea con el público.
-- Le tengo mucho cariño a “Fachada”. Es el espacio que más me ha dado.
Miguel Hernández, Plan Especial de Construcciones de la provincia de La Habana y esposo de Yolanda, la del testimonio anterior:
-- Consuelito es la que mejor metodología tiene para conducir un programa.
Consuelo (de las Mercedes) Vidal (y Regal) puede definirse como mujer de 40 años, delgada, actriz pelicorta, habladora. Añádase que es llana, espontánea, ocurrente, simpática, dicharachera, viva, bromista, desenfadada, fácil, risueña y que su ingenio le ha ganado el cetro de la mejor animadora de este país.
-- Oye, se te fue la mano. Nunca me habían dicho tantas cosas juntas.
-- A Consuelo lo que es de Consuelito, señora.
Si usted tiene tiempo, pregúntele a Miraida Hernández (ama de casa de Santa Clara), Tomasa Pérez (de Ciudad Sandino, Guane), Jorge Izaguirre (técnico veterinario de Cienfuegos) o Andrés Duarte (de Placetas, miembro de la Columna Juvenil del Mar). Todos le responderán lo mismo: que les gusta.
En reciente encuesta, el 81% de los entrevistados se refirió a ella en términos favorables (muy buena, agradable, trabaja muy bien, etc.). El 19% no tuvo opinión formada (en gran parte son personas que no ven televisión habitualmente). ¡Nadie habló mal de su actuación!
Estrella Morejón, Cotorro:
-- En casa vemos todos sus programas.
Arnaldo León, pintor de brocha gorda, Cienfuegos:
-- A mí me encanta.
Zoila Márquez, empleada de la tienda “La Mercantil”, Contramaestre:
-- Se gana el cariño de una.
María Julia Proenza, estudiante preuniversitaria, Mayarí:
-- Lo mejor es que no es fingida.
Roberto López, profesor de secundaria, Ciego de Ávila:
-- Es formidable.
Yolanda Martínez, Ministerio de Comunicaciones, Habana:
-- Me gusta la forma en que anima Consuelito. Ese diálogo que crea con el público.
-- Le tengo mucho cariño a “Fachada”. Es el espacio que más me ha dado.
Miguel Hernández, Plan Especial de Construcciones de la provincia de La Habana y esposo de Yolanda, la del testimonio anterior:
-- Consuelito es la que mejor metodología tiene para conducir un programa.
Consuelo (de las Mercedes) Vidal (y Regal) puede definirse como mujer de 40 años, delgada, actriz pelicorta, habladora. Añádase que es llana, espontánea, ocurrente, simpática, dicharachera, viva, bromista, desenfadada, fácil, risueña y que su ingenio le ha ganado el cetro de la mejor animadora de este país.
-- Oye, se te fue la mano. Nunca me habían dicho tantas cosas juntas.
-- A Consuelo lo que es de Consuelito, señora.
Si usted tiene tiempo, pregúntele a Miraida Hernández (ama de casa de Santa Clara), Tomasa Pérez (de Ciudad Sandino, Guane), Jorge Izaguirre (técnico veterinario de Cienfuegos) o Andrés Duarte (de Placetas, miembro de la Columna Juvenil del Mar). Todos le responderán lo mismo: que les gusta.
En reciente encuesta, el 81% de los entrevistados se refirió a ella en términos favorables (muy buena, agradable, trabaja muy bien, etc.). El 19% no tuvo opinión formada (en gran parte son personas que no ven televisión habitualmente). ¡Nadie habló mal de su actuación!
Estrella Morejón, Cotorro:
-- En casa vemos todos sus programas.
Arnaldo León, pintor de brocha gorda, Cienfuegos:
-- A mí me encanta.
Zoila Márquez, empleada de la tienda “La Mercantil”, Contramaestre:
-- Se gana el cariño de una.
María Julia Proenza, estudiante preuniversitaria, Mayarí:
-- Lo mejor es que no es fingida.
Roberto López, profesor de secundaria, Ciego de Ávila:
-- Es formidable.
EL GUSTO DE PRESENTARLES
Aquí entra musiquita, para provocar interés.
-- Señoras y señores, compañeros todos: con mucho gusto y fina voluntad les presentamos a Consuelito Vidal ¡en persona!
Sube la música, se establece y va disolviendo.
Aquí entra musiquita, para provocar interés.
-- Señoras y señores, compañeros todos: con mucho gusto y fina voluntad les presentamos a Consuelito Vidal ¡en persona!
Sube la música, se establece y va disolviendo.
-- ¿Le metemos, chica?
-- ¡Le metemos, chico!
Pues, nació en La Habana.
-- En el Cerro, calle Marianao Nº 165, cerquita de la planta de refrescos Materva. Quizás por eso he estado siempre tan “materva”. De niña tomé toneladas de leche condensada a ver si engordaba pero nada.
Y no tuvo antecedentes artísticos.
-- El genio de la familia fui yo. Mi madre era ama de casa y mi padre carpintero. Gallega y cubano. Soy hija única.
UNA MARIPOSITA GRIEGA
-- Todo empezó porque yo recitaba en la escuela.
Vaya, el proceso natural.
-- Y me daban cranque. Me ponían mi túnica griega –parecía una mariposita- y me aparecía en los fines de curso del Colegio Borroto en el cine Maravillas. Recitaba “Alegría del mar” y repetía alegría del mar, alegría del mar, alegríaaa…
Quien no estuvo en el Maravillas se perdió algo importante.
-- Estaba de moda Berta Singerman y lo griego era la onda.
¿Nunca tuviste miedo de salir a hacer eso?
-- ¿Miedo? Si me aplaudían muchísimo. Les gustaba, te digo que les gustaba.
¡Qué época!
ROMANCE CON GREGORY PECK
-- Estudié hasta sexto grado. Mis padres eran pobres. Ni soñar con una carrera. Y para ir matando el tiempo empecé el solfeo.
-- El genio de la familia fui yo. Mi madre era ama de casa y mi padre carpintero. Gallega y cubano. Soy hija única.
UNA MARIPOSITA GRIEGA
-- Todo empezó porque yo recitaba en la escuela.
Vaya, el proceso natural.
-- Y me daban cranque. Me ponían mi túnica griega –parecía una mariposita- y me aparecía en los fines de curso del Colegio Borroto en el cine Maravillas. Recitaba “Alegría del mar” y repetía alegría del mar, alegría del mar, alegríaaa…
Quien no estuvo en el Maravillas se perdió algo importante.
-- Estaba de moda Berta Singerman y lo griego era la onda.
¿Nunca tuviste miedo de salir a hacer eso?
-- ¿Miedo? Si me aplaudían muchísimo. Les gustaba, te digo que les gustaba.
¡Qué época!
ROMANCE CON GREGORY PECK
-- Estudié hasta sexto grado. Mis padres eran pobres. Ni soñar con una carrera. Y para ir matando el tiempo empecé el solfeo.
Eslava, naturalmente.
-- Mi madre quería que fuera pianista. Llegué hasta octavo año de piano. Me encantaba tocar Chopin.
Porque, aunque nadie lo imagine, ella se define como “extremadamente romántica”.
-- De suspiros, flores y eso. Se me pone la carne de gallina con una puesta de sol. Me arrebata contemplar el mar. Y las poesías.
Entonces, era lógico que oyera “La novela del aire”.
-- ¡Niño!, todas las noches.
-- Adoraba a Ernesto Galindo y María Valero. me quedaba lela con aquellas voces, aquellos amores. Esperaba las revisticas para recortar fotografías de los artistas. De ahí surgió el gran amor de mi vida: Gregory Peck. Aunque él jamás se enteró.
Pero Gregory Peck era más bien feo.
-- Me gustaban los feos. Nunca me interesé por Robert Taylor o Tyrone Power.
Soñaba con ser estrella de cine.
-- No, anhelaba ser actriz de radio, que era algo posible.
CON EL RECIBO DE LA QUINTA
-- Con el recibo de la Quinta Benéfica –mi padre era socio- una podía tomar clases de declamación con Joaquín Riera en el Plantel Concepción Arenal.
Del Muy Ilustre Centro Gallego de La Habana.
-- En la Emisora de los Tranvías necesitaban una “damita joven” y allá fue la niña.
Acompañada de mamá.
-- Por supuesto. La vieja cuidaba de su hija. Ser artista despertaba recelos. Hoy el medio artístico ha cambiado mucho, es como un convento. Pero en aquellos tiempos…
-- Pasé a Radio Teatro Ideas Pazos. Se hacía una obra completa cada noche. Me fascinaba todo eso. Decidí ser actriz.
DAMITA JOVEN MERITORIA
-- Gané un premio en un concurso de aficionados.
El pomposo Concurso Radio Teatral RHC Cadena Azul.
-- Teníamos un cuadrito de comedias. Agustín Campos montaba los papeles y actuábamos los domingos.
Como de costumbre, el espacio de aficionados desapareció y los ganadores se esfumaron.
-- Ahí entra a jugar la palanca, tan necesaria entonces. Yo era “ahijada” de la dueña de Orbay y Cerrato. Esta señora explotaba a mi padre –trabajaba como loco en la mueblería por cien pesos al mes- pero así y todo yo era su “ahijadita”. Orbay y Cerrato se anunciaba en RHC. Me dieron un chance. Hacía un sketchito en un programa campesino. Sin cobrar, claro. “Actriz meritoria” le decían a eso.
UN CONTRATICO DE A PESO
1944, 45. Amado Trinidad (El Guajiro), empresario de chispa, ha llegado de Las Villas para destronar a la CMQ de Monte y Prado. Su Cadena Azul lanza tongas de episodios y novelones, importa cantantes, lo que sea. La competencia comercial se agudiza en la radio.
-- Seis meses después me hicieron un contratico. Un peso diario por todo lo que hiciera.
Le dieron un buen papel en “Las aventuras de Roldán, el temerario”, que escribía Carballido Rey.
-- Veinte años más tarde, Carballido me confesó que me pusieron porque a mí no me importaba dañarme la garganta. Metía unos gritos que se oían a cuatro cuadras. Las demás actrices eran “vivas” y no lo hacían, se cuidaban. Casi me destrozo las cuerdas vocales dando aquellos alaridos de espanto al final de los capítulos.
LLEGA LA TV
-- Con la televisión empezó el desparrame. Aquel que tenía una voz preciosa de galán resultó ser chiquitico y jorobado, la gran “primera actriz” tenía demasiadas libras, en fin…
Se rompió el encanto de las voces fabulosas. Hubo que buscar nuevas figuras.
-- Ahí fue donde apreté.
Surge “Hogar moderno”, aquella serie donde Amparo Jordán y Julito Díaz eran los padres. Cholito Soler el noviecito…
-- …y yo era la hija. ¿No se acuerdan? ¿No? Ay, chico, nadie recuerda eso.
Trabajaba también en radio. Novelas interminables.
-- “Mi apellido es Valdés” y “Puerto Esperanza” fueron dos de las más sonadas. Hicimos llorar a media humanidad.
EL DINERO NO ES LA VIDA
-- Fue entonces cuando la Gravi necesitó una voz –“populachera”, decían ellos- para anunciar un nuevo jabón de lavar: Rina. Me probaron y empecé como locutora. Claro, seguía soñando con ser una ‘primerísima’ actriz. Pero los anunciantes, que lo eran todo, dijeron que no. El jabón se vendía. Y caí sepultada en eso. En la calle me decían Rina. Tenía olor a Rina. Me sentía yo misma una pastilla de jabón amarillo. En fin de cuentas aquello me perjudicó. Porque gané mucho dinero –más que el que hubiera ganado como actriz- pero el dinero no lo es todo en la vida, viejo.
LA FLACA DE LOS ALTOS
-- En “Fiesta de las 7 menos 5” por CMQ Televisión debuté como animadora. Y parece que caí bien.
De ahí acá corren miles de programas. Un buen trecho. El suficiente para que puliera ese modo “al natural” de decir y sonreir que la ha introducido definitivamente casa por casa. Consuelito, dándonos la impresión de ser “la flaca de los altos”. Una explosión de espontaneidad a la medida de los televisores.
-- La animación me gusta por lo cerquita que una se siente de la gente. Pero es peligrosa. Cuando animas, la mayoría de las veces vas inventando. Vas filtrando lo que tienes que decir y con la misma eso está saliendo por la boca a mil por hora. La dificultad está en hallar el límite. Encontrar una barrera hasta donde se llegue sin caer pesado al público, sin molestarlo, sin soltar barbaridades o tonterías. Eso es lo más complicado.
LA OTRA, LA ACTRIZ
Hay una Consuelito Vidal que usted encontrará narrando la entrada de la Flota Soviética en La Habana, introduciendo a Sergio Endrigo en el Festival de la Canción de Varadero, presentando en Varsovia el Día de Cuba en la TV polaca, protagonizando durante ocho meses la revista musical “Consuelito en el circo” ante cabarets repletos o acometiendo con toda seriedad un acto político de envergadura. Pero hay otra: la actriz.
-- Siempre encuentro tiempo para actuar. Protagonicé “Yerma”, de García Lorca, en cine para televisión y “El robo”, un largometraje del ICAIC. Si miran “Teatro ICR” los lunes me verán en la Stella de “Un tranvía llamado deseo”, en “Delito en la isla de las cabras”, de Betti, o en la “Farsa del Cornudo Apaleado y Contento”. Roberto Garriga, el más conocedor de los directores dramáticos de nuestra televisión, es mi mejor crítico. Y al que más caso le hago. Él me dirigió la Catalina de Aragón en “Jaque al Rey”, del alemán Grasicker.
-- Pocos saben que soy la voz en off de “Amigo”, el títere (martes, 6:30, canal 6). En Radio Liberación (7:15 a.m.) soy la Tía Tata que cuenta cuentos a los fiñes antes de que se marchen al colegio. Allí mismo hago voces de animales. Me especializo en lagartijas, patos y chivitos. A veces salgo en “El cuento” (lunes, 8:30, Canal 6). Animo los programas “Aquí Cuba” que enviamos grabados al extranjero. Se pasan en Chile, Perú y por Radio Barcelona, España.
DESPEDIDA
Entra la musiquita –versión instrumental de "Buchipluma namá"- y queda de fondo.
Consuelito (a cámara):
-- Bien, eso es todo por hoy. Esperamos que hayan pasado un rato agradable y los invitamos a estar con nosotros el próximo miércoles en otro programa “Detrás de la fachada”.
Sube la musiquita.
Porque, aunque nadie lo imagine, ella se define como “extremadamente romántica”.
-- De suspiros, flores y eso. Se me pone la carne de gallina con una puesta de sol. Me arrebata contemplar el mar. Y las poesías.
Entonces, era lógico que oyera “La novela del aire”.
-- ¡Niño!, todas las noches.
Ábrense las páginas sonoras
de ‘La novela del aire’
para ofrecer a usted la emoción
y el romance de un nuevo capítulo
-- Adoraba a Ernesto Galindo y María Valero. me quedaba lela con aquellas voces, aquellos amores. Esperaba las revisticas para recortar fotografías de los artistas. De ahí surgió el gran amor de mi vida: Gregory Peck. Aunque él jamás se enteró.
Pero Gregory Peck era más bien feo.
-- Me gustaban los feos. Nunca me interesé por Robert Taylor o Tyrone Power.
Soñaba con ser estrella de cine.
-- No, anhelaba ser actriz de radio, que era algo posible.
CON EL RECIBO DE LA QUINTA
-- Con el recibo de la Quinta Benéfica –mi padre era socio- una podía tomar clases de declamación con Joaquín Riera en el Plantel Concepción Arenal.
Del Muy Ilustre Centro Gallego de La Habana.
-- En la Emisora de los Tranvías necesitaban una “damita joven” y allá fue la niña.
Acompañada de mamá.
-- Por supuesto. La vieja cuidaba de su hija. Ser artista despertaba recelos. Hoy el medio artístico ha cambiado mucho, es como un convento. Pero en aquellos tiempos…
-- Pasé a Radio Teatro Ideas Pazos. Se hacía una obra completa cada noche. Me fascinaba todo eso. Decidí ser actriz.
DAMITA JOVEN MERITORIA
-- Gané un premio en un concurso de aficionados.
El pomposo Concurso Radio Teatral RHC Cadena Azul.
-- Teníamos un cuadrito de comedias. Agustín Campos montaba los papeles y actuábamos los domingos.
Como de costumbre, el espacio de aficionados desapareció y los ganadores se esfumaron.
-- Ahí entra a jugar la palanca, tan necesaria entonces. Yo era “ahijada” de la dueña de Orbay y Cerrato. Esta señora explotaba a mi padre –trabajaba como loco en la mueblería por cien pesos al mes- pero así y todo yo era su “ahijadita”. Orbay y Cerrato se anunciaba en RHC. Me dieron un chance. Hacía un sketchito en un programa campesino. Sin cobrar, claro. “Actriz meritoria” le decían a eso.
UN CONTRATICO DE A PESO
1944, 45. Amado Trinidad (El Guajiro), empresario de chispa, ha llegado de Las Villas para destronar a la CMQ de Monte y Prado. Su Cadena Azul lanza tongas de episodios y novelones, importa cantantes, lo que sea. La competencia comercial se agudiza en la radio.
-- Seis meses después me hicieron un contratico. Un peso diario por todo lo que hiciera.
Le dieron un buen papel en “Las aventuras de Roldán, el temerario”, que escribía Carballido Rey.
-- Veinte años más tarde, Carballido me confesó que me pusieron porque a mí no me importaba dañarme la garganta. Metía unos gritos que se oían a cuatro cuadras. Las demás actrices eran “vivas” y no lo hacían, se cuidaban. Casi me destrozo las cuerdas vocales dando aquellos alaridos de espanto al final de los capítulos.
LLEGA LA TV
-- Con la televisión empezó el desparrame. Aquel que tenía una voz preciosa de galán resultó ser chiquitico y jorobado, la gran “primera actriz” tenía demasiadas libras, en fin…
Se rompió el encanto de las voces fabulosas. Hubo que buscar nuevas figuras.
-- Ahí fue donde apreté.
Surge “Hogar moderno”, aquella serie donde Amparo Jordán y Julito Díaz eran los padres. Cholito Soler el noviecito…
-- …y yo era la hija. ¿No se acuerdan? ¿No? Ay, chico, nadie recuerda eso.
Trabajaba también en radio. Novelas interminables.
-- “Mi apellido es Valdés” y “Puerto Esperanza” fueron dos de las más sonadas. Hicimos llorar a media humanidad.
EL DINERO NO ES LA VIDA
-- Fue entonces cuando la Gravi necesitó una voz –“populachera”, decían ellos- para anunciar un nuevo jabón de lavar: Rina. Me probaron y empecé como locutora. Claro, seguía soñando con ser una ‘primerísima’ actriz. Pero los anunciantes, que lo eran todo, dijeron que no. El jabón se vendía. Y caí sepultada en eso. En la calle me decían Rina. Tenía olor a Rina. Me sentía yo misma una pastilla de jabón amarillo. En fin de cuentas aquello me perjudicó. Porque gané mucho dinero –más que el que hubiera ganado como actriz- pero el dinero no lo es todo en la vida, viejo.
LA FLACA DE LOS ALTOS
-- En “Fiesta de las 7 menos 5” por CMQ Televisión debuté como animadora. Y parece que caí bien.
De ahí acá corren miles de programas. Un buen trecho. El suficiente para que puliera ese modo “al natural” de decir y sonreir que la ha introducido definitivamente casa por casa. Consuelito, dándonos la impresión de ser “la flaca de los altos”. Una explosión de espontaneidad a la medida de los televisores.
-- La animación me gusta por lo cerquita que una se siente de la gente. Pero es peligrosa. Cuando animas, la mayoría de las veces vas inventando. Vas filtrando lo que tienes que decir y con la misma eso está saliendo por la boca a mil por hora. La dificultad está en hallar el límite. Encontrar una barrera hasta donde se llegue sin caer pesado al público, sin molestarlo, sin soltar barbaridades o tonterías. Eso es lo más complicado.
LA OTRA, LA ACTRIZ
Hay una Consuelito Vidal que usted encontrará narrando la entrada de la Flota Soviética en La Habana, introduciendo a Sergio Endrigo en el Festival de la Canción de Varadero, presentando en Varsovia el Día de Cuba en la TV polaca, protagonizando durante ocho meses la revista musical “Consuelito en el circo” ante cabarets repletos o acometiendo con toda seriedad un acto político de envergadura. Pero hay otra: la actriz.
-- Siempre encuentro tiempo para actuar. Protagonicé “Yerma”, de García Lorca, en cine para televisión y “El robo”, un largometraje del ICAIC. Si miran “Teatro ICR” los lunes me verán en la Stella de “Un tranvía llamado deseo”, en “Delito en la isla de las cabras”, de Betti, o en la “Farsa del Cornudo Apaleado y Contento”. Roberto Garriga, el más conocedor de los directores dramáticos de nuestra televisión, es mi mejor crítico. Y al que más caso le hago. Él me dirigió la Catalina de Aragón en “Jaque al Rey”, del alemán Grasicker.
-- Pocos saben que soy la voz en off de “Amigo”, el títere (martes, 6:30, canal 6). En Radio Liberación (7:15 a.m.) soy la Tía Tata que cuenta cuentos a los fiñes antes de que se marchen al colegio. Allí mismo hago voces de animales. Me especializo en lagartijas, patos y chivitos. A veces salgo en “El cuento” (lunes, 8:30, Canal 6). Animo los programas “Aquí Cuba” que enviamos grabados al extranjero. Se pasan en Chile, Perú y por Radio Barcelona, España.
DESPEDIDA
Entra la musiquita –versión instrumental de "Buchipluma namá"- y queda de fondo.
Consuelito (a cámara):
-- Bien, eso es todo por hoy. Esperamos que hayan pasado un rato agradable y los invitamos a estar con nosotros el próximo miércoles en otro programa “Detrás de la fachada”.
Sube la musiquita.
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LES INVITO A LEER LAS SIGUIENTES PIEZAS DE MI BLOG
PULSANDO SOBRE ESTOS ENLACES:
El Blog de Pedraza Ginori > QUÉ PENA, CONSUELO VIDAL, QUE LA VIDA NO TENGA REWIND
El Blog de Pedraza Ginori > PEPE ARGOTE, CASINERO, PERSONALIDAD DE LA CULTURA CUBANA
El Blog de Pedraza Ginori > JOSEÍTO, EL DE LA GUANTANAMERA, EL QUE VIVÍA EN GERVASIO
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/////////////////
La empresa norteamericana Create Space / Amazon ha publicado,
en formato papel, mis dos libros "Pedraza Ginori Memorias Cubanas".
Sus páginas son un compendio de mis experiencias y mis circunstancias, vividas en el mundo de la televisión, los espectáculos, la creación musical,
la radio, la publicidad y la prensa.
Los dos volúmenes recogen, en clave autobiográfica, sucesos, “batallitas”, semblanzas, anécdotas y reflexiones personales.
El Libro 1, “Eugenito quiere televisión”, tiene 342 páginas.
El Libro 2, "Quietecito no va conmigo", 362 páginas.
Ambos están a la venta en las webs
www.createspace.com www.amazon.com www.amazon.es
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///////////////////////////////////////La empresa norteamericana Create Space / Amazon ha publicado,
en formato papel, mis dos libros "Pedraza Ginori Memorias Cubanas".
Sus páginas son un compendio de mis experiencias y mis circunstancias, vividas en el mundo de la televisión, los espectáculos, la creación musical,
la radio, la publicidad y la prensa.
Los dos volúmenes recogen, en clave autobiográfica, sucesos, “batallitas”, semblanzas, anécdotas y reflexiones personales.
El Libro 1, “Eugenito quiere televisión”, tiene 342 páginas.
El Libro 2, "Quietecito no va conmigo", 362 páginas.
Ambos están a la venta en las webs
www.createspace.com www.amazon.com www.amazon.es
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